La Fábrica Textil Imbabura de Atuntaqui es considerada el ícono de la manufactura artesanal en la Sierra Norte. Empezó a funcionar en 1927 en la parroquia Andrade Marín con más de 1200 trabajadores. En el año de 1964 tuvo que cerrar, los trabajadores fueron despedidos y quedó en total abandono.
Gracias al Decreto de Emergencia de Patrimonio Cultural, la Unidad de Gestión inició trabajos urgentes en este bien cuyos techos, ventanas y muros estaban en pésimo estado, poniendo en peligro de robo y deterioro a las máquinas y equipo industrial, verdaderas joyas de patrimonio mueble.
Las principales líneas de trabajo se orientaron a la recuperación de muros, impermeabilización de cubiertas y conducción de aguas lluvias. La propuesta fue aprobada por el Comité de Gobernanza y se arrancó con los trabajos en agosto de 2008, con un presupuesto inicial cercano a los 500.000 dólares. Sin embargo, las patologías que afectaban a esta edificación patrimonial demandaron una inversión mucho mayor que llegó a los 973.000 dólares. Caber anotar que en la provincia de Imbabura se invirtieron más de 3 millones de dólares a través del Decreto de Emergencia.
Una vez restaurado este bien, el cual estaba en manos del IESS, pasó a propiedad del Municipio de Antonio Ante que ha sido eje y se ha comprometido a realizar la recuperación completa de la fábrica, creando sitios de exhibición artesanal, información turística, casa de la juventud y otros espacios para las artes.
El Ecuador es la suma de todos sus patrimonios y cada ciudadana, cada ciudadano, es custodio, propietario y creador del gran acervo patrimonial de nuestro país.
